En el marco del proyecto “Al rescate del tomate criollo”, que busca recuperar el sabor del tomate a partir de la recolección, intercambio y mejora colaborativa de tomates criollos, el pasado 26 de junio se llevó a cabo de forma virtual el taller Tomate Criollo. Campaña 2023 – 2024. “Trabajando desde el mejoramiento participativo”. ¡Alrededor de 30 evaluadorxs y huerterxs de distintas partes del país participaron del taller!
Allí, los equipos de Bioleft, la cátedra de genética de Facultad de Agronomía de la Universidad de Buenos Aires (FAUBA) y la Estación Experimental de Gorina del Ministerio de Desarrollo Agrario de la Provincia de Buenos Aires (MDA), compartieron los resultados de la evaluación colaborativa de tres variedades de tomate criollo; “Aimé” (ex Milonga, identificada con el número 7), “Nomeolvides” (identificada con el número 56) y “La Piqui” (ex Lilyana, identificada con el número 172). Con el objetivo de determinar la viabilidad de las semillas y el comportamiento de estas variedades, en esta campaña 2023-2024, se evaluaron las siguientes variables:
- Poder germinativo (PG): Componente de la calidad de las semillas. Indica la proporción de semillas que logran germinar y desarrollar una planta.
- Tolerancia al estrés hídrico: Es la capacidad de las plantas de desarrollarse en condiciones de sequía y/o altas temperaturas.
- Sanidad: Determina la susceptibilidad a plagas y enfermedades.
- Duración poscosecha: Es el tiempo que los frutos conservan sus características luego de ser cosechados.
- Degustación de los frutos: Determina las cualidades organolépticas de los frutos. Se evalúa sabor, aroma, textura, etc.
En cuanto al poder germinativo, no hubo diferencias significativas entre las variedades, siendo Aimé (7) la que mayor porcentaje logró, con un 76% de PG.
Las variables tolerancia al estrés hídrico y sanidad se midieron en una escala del 1 al 5, arrojando valores cercanos al 4 para las 3 variedades. La duración poscosecha rondó los 10 días para las 3 variedades.
Respecto a la degustación de los frutos cosechados; la variedad Aimé (7) resultó ser la más dulce y menos ácida, la variedad La Piqui (172) la más jugosa y de pulpa más blanda. Esta última, junto con la variedad Nomeolvides (56) fueron registradas con mayor aroma a tomate maduro.
Como cierre de esta primera parte del taller, Gabriela Aungat y Nicolás Davico, dos evaluadorxs que participaron en esta campaña de evaluación colaborativa, compartieron los principales aprendizajes desde su experiencia, comentando los principales desafíos relacionados con el registro y su motivación a seguir participando.
Gabriela es de la localidad de Dina Huapi, provincia de Rio Negro, cultiva desde hace mucho tiempo y participa del proyecto desde hace unos 3 años. En este recorrido, nos contó que aprendió muchísimo, adquiriendo conocimientos muy valiosos sobre el desarrollo de la planta, como observar la floración, qué cosas tener en cuenta para promover que haya más flores y prosperen todas. También aprendió mucho acerca de las necesidades de luz y temperaturas ideales para el desarrollo óptimo de la planta. Precisamente el clima fue uno de los desafíos de la campaña, hizo mucho calor al principio de la temporada y hubo algunas heladas tempranas. En cuanto a enfermedades y plagas, trabajó con huerterxs de la zona en la elaboración de biopreparados y logró controlarlas.
Nicolás vive en Esperanza, provincia de Santa Fé, junto a su familia lleva adelante una huerta urbana. Nos muestra orgulloso la cosecha del día, celebra llevar tomates frescos a la mesa en el mes de julio. “Aún no heló en la ciudad”, nos dice. Nos cuenta que este año las plantas sufrieron mucho debido a las altas temperaturas (cercanas a los 40°) y el sol intenso. En diciembre se le enfermaron todas las plantas y tuvo que sacarlas a todas. Volvió a empezar desde semilla y desde abril le están dando tomates. Para esta fecha, ve cómo las plantas van bajando su producción, “el sabor también cambia un poco. Pero siguen estando espectaculares”. Su principal motivación es poder compartirlo con su familia, “hicimos una degustación de los tomates y ver la cara de mis hijos probando los cherrys es lo que más me motiva”.
A continuación, el equipo de FAUBA realizó una breve introducción a conceptos como hibridación y cruzamientos para luego compartir los trabajos que vienen llevando adelante en la obtención de híbridos de interés a partir de las variedades evaluadas en el marco del proyecto. Si querés ver los videos de nuevo para aprender más, miralos acá:
Cruzamientos en tomate. Parte 1.
Cruzamientos en tomate Parte 2.
Cruzamientos en tomate Parte 3.
Estos nuevos materiales en proceso de selección fueron degustados el pasado 12 de abril en el marco de la XII Jornada de Extensión Fauba. Si querés recordar el evento, podés mirarlo acá:
¿Alguna vez probaste tomates con sabor?.
De todas las variedades, la que resultó tener mejor sabor fue la variedad silvestre “LA”. Dentro de los híbridos, el mejor puntuado fue el “X”. Y dentro de los Cherry, el mejor sabor correspondió a la variedad “86”.
Luego, Ignacio Castro, técnico a cargo de los ensayos en la Estación Experimental de Gorina, explicó aspectos importantes vinculados al manejo del cultivo de tomate. Se expusieron criterios de distanciamiento entre plantas (un mínimo de 35 cm) y fundamentos sobre las prácticas de desbrote, deshoje y tutorado. Estas prácticas favorecen el desarrollo y crecimiento de los frutos.
También explicó sobre las plagas y enfermedades que pueden afectar al cultivo de tomate, sus síntomas y técnicas de control. Una de las principales enfermedades es el Virus Rugoso del Tomate (ToBRFV), recientemente ingresado al país a través de semillas híbridas de tomate que, al no contar con materiales resistentes, ocasionó grandes pérdidas y complicaciones en la campaña. Los principales síntomas de este virus son deformación, aspecto arrugado y aparición de moteado clorótico en hojas; además los frutos sufren decoloraciones, manchas bronceadas con rugosidad y una maduración irregular. Se transmite por inoculación mecánica, por el contacto entre plantas y durante las labores del cultivo, y por el empleo de semilla contaminada. Si querés una guía fácil, acá te dejamos un folleto.
Otras enfermedades de importancia para el cultivo de tomate son la Mancha de la hoja (Septoria lycopersici), Tizón temprano (Alternaria solanii) y Oídio (Erysiphe spp.). Como principal plaga se mencionó a la Polilla del Tomate (Tuta absoluta). Si te interesa saber más, acá hay más información.
Enfermedades foliares en tomate.
Ignacio mostró los resultados de las evaluaciones realizadas durante esta campaña en la que se evaluaron 80 variedades de tomate criollo bajo un planteo agroecológico. Se realizó un registro de cosecha anotando número y peso de frutos, midiendo el rendimiento por planta de cada una de las variedades.
Finalizando el taller, desde Bioleft se destacamos el compromiso y participación de lxs más de 20 huerterxs que durante toda la campaña cultivaron y evaluaron las tres variedades de tomate criollo, completando las planillas e interactuando con otrxs en los grupos de Whatsapp. Celebramos que, a estas instancias, se están dando encuentros e intercambios entre huerterxs de forma autónoma, como el de Yael con Haydeé y Myriam que compartimos en esta nota.
Como cierre del taller, se invitó a todxs a participar de la próxima campaña 2024–2025 de evaluación colaborativa de tomates criollos. En esta oportunidad se evaluarán, además de las tres variedades ya mencionadas (Aimé, Nomeolvides y La Piqui), variedades de tomate perita.
Agradecemos a todxs por el compromiso y la participación, tanto en la campaña de evaluación como en el taller.
Si querés sumarte no dudes en contactarnos a través de nuestras redes, próximamente estaremos compartiendo los formularios de inscripción.